Escritorio
Por Loretto Rodas
Estamos en tiempos donde la bendita Pandemia nos enseñó mucho a todas las compañías y los que trabajábamos en ellas. En estos casi dos años realmente vivimos etapas muy fuertes ya que algunos empresarios vivimos el miedo a lo nuevo que venía, la incertidumbre de no saber históricamente que iba a pasar con nuestras empresas, y todos los cambios en los cuales tuvimos que acceder, aceptar, sin estar preparados.
También tuvimos sorpresas con algunas empresas que comenzaron a crecer gracias a que no se resistieron a nuevas ideas, a nuevas formas de trabajar y de conectar con todos sus grupos de influencia.
A ti Empresario, ¿Cómo te fue?
En este periodo yo pasé por muchas etapas y en realidad me costaba mucho trabajo ver la desesperación de los directores y socios, pensando algunos que no lo iban a lograr “sobrevivir” porque todo el descontrol se presentó de muchas maneras, en muchas áreas de trabajo.
Eso me permitió ver la vulnerabilidad y el miedo a sentir miedo; porque el control se volvió descontrol y entonces apareció la creatividad, flexibilidad y las posibilidades de escuchar más abiertamente a nuestros expertos que eran “nuestros colaboradores”
A partir de ahora hablaré de una parte en donde invito a todos abrir su corazón y su mente… ¡ROMPAMOS CON PARADIGMAS!
Los empresarios y emprendedores necesitamos hablar del AMOR, de la conexión con nuestros colaboradores, clientes, proveedores, comunidad en todos los niveles, saber que es necesario aplicar la inteligencia emocional, generar resultados de valor, reconocer los logros y reconocer también las fallas, así como ser flexibles en tiempos de cambio.
Los empresarios, no a todos, nos enseñaron que los líderes sólo tenían que hablar de negocios, resultados, objetivos, trabajo, trabajo, y más trabajo.
Sin embargo, considero que en esta nueva etapa donde todos estamos re-aprendiendo y rompiendo con paradigmas, porque existe hoy la necesidad de darnos permiso para ser seres humanos más reales. Nosotros somos seres completamente integrales, donde nuestra vida personal y profesional son un complemento.
Hoy como dueños de una compañía, directores, socios, gerentes, en una palabra, como líderes, tenemos el compromiso de nutrirnos como seres sintientes para poder aportar mayor valor a nuestras empresas y por ende a las personas que colaboran e intervienen en nuestra compañía de manera directa e indirecta.
Es importante lograr que toda persona se sienta mucho más conectados al ser humano y no al EGO EMPRESARIAL de no querer mostrar lo que se siente fallar, lograr, no llegar a un objetivo y a la superación de las metas por departamento o como empresa.
Comprometamos a hablar de nuestros miedos, de nuestras inquietudes, de buscar y encontrar para hacer lo que amamos, de lograr que toda persona que toque nuestra empresa se sienta bien recibido, atendido y en un lugar seguro.
Abrámonos a nuevas formas de servir, de contribuir, de apoyar, de generar y ser ejemplares en lo que decimos, pensamos y sentimos.
Nuestro compromiso como emprendedores y empresarios hoy es mucho mayor, porque aquí cuando generamos experiencias en nuestros clientes, cuando aportamos bienestar a nuestros colaboradores, cuando generamos alianzas reales con nuestros proveedores, entonces como reloj, comienza la magia de la vida y las utilidades y todos los ingresos de nuestras empresas serán el fin más no el medio.
¿Estás dispuesto empresario a romper con paradigmas y conectar con el verdadero propósito de esta Nueva Era en el Mundo Empresarial?